MANOS

La lluvia que violenta en mis cristales picotea,
con su morse insistente me repite:
No estas sola, somos muchos que mirando aquel lucero del poeta,
un abrazo conjunto nos aprieta, nos funde, nos confunde, nos alienta...

A seguir caminando por la senda con escollos, de la vida,
de tu mano, de su mano, de mil manos
que enlazadas, apuntando a las estrellas,
nos despejan el camino de tropiezos, sombras negras, desalientos y agonías....

Y si las manos ya por la vejez curtidas,
no aprietan, no sujetan, no sostienen, no presionan...
será que necesito de tus brazos, tu calor, tu presencia......, de tu vida.                      NIEBLA