Miedos de esos ojos
que me miran,
que me observan,
me controlan,
me persiguen.
Esperando que me olvide
que me siguen...
para asaltar mi conciencia adormecida,
y publicar,
los secretos mas guardados...
Soy cobarde, lo se,
y el caminar de mi vida,
siempre arrastra la sombra del recelo,
esa sombra...
la duda, inquietante, persistente.
Que hay ojos vigilantes que me miran,
sin conciencia que existen...
yo lo se,
pero que frenan libertades perseguidas,
me asustan, me controlan, me dominan...
Y me llevan por caminos escondidos,
silenciosos, solitarios...
donde el miedo, se toca con las manos...
Si debajo del casco de la frente,
los ojos de la mente traspasaran....
Ay, Señor¡¡¡
Otro gallo nos cantara....
NIEBLA.
El final está genial Niebla. Abre ese tercer ojo, que seguro que los miedos se espantan. Debemos arrancarlo, que luego pasa lo que pasa, mira mi poema ¡eh! ¡menuda pesadilla!
ResponderEliminarEstupendo tu sentir.
Besitos Niebla.
Somos mucha gente recelosa, insegura, reservada...
ResponderEliminarDueños de nuestra privacidad...
Miedosos de ese tercer ojo..."que ve debajo de la tapa de los sesos..." je je je
Tu pesadilla, noooooooo¡¡¡¡¡¡
Besos y abrazos.